Ya llevo un mes en Nicaragua trabajando para Save the Children. Hoy voy a contar en que está consistiendo mi trabajo aquí.
Lo primero me gustaría resaltar que aunque el mundo de la cooperación es distinto al mundo farmacéutico, ambos tienen grandes semejanzas. Al fin y al cabo yo los veo como empresas, en las que hay que cumplir objetivos en un plazo determinado.
Tardé poco tiempo en adaptarme al lenguaje específico de las ONG. Por ejemplo, se le llama socio, a lo que yo llamo “subcontrata”. Me recordó a mi inicio en el mundo laboral, hace más de 10 años en el campo de los registros farmacéuticos. Se me vino a la mente la cantidad de palabras y siglas específicas que tenemos… que al que lleva tiempo le resulta fácil pero al que llega de nuevas le parece un mundo. Aquí se le ha sumado la pequeña “complejidad” del idioma porque aunque es español… tiene sus diferencias.
Durante este tiempo identificamos varios departamentos donde había mayor oportunidad de mejora, éstos son el área de finanzas, recursos humanos, área de programas y administración. Quizás éste último es el más complejo porque engloba tanto las compras, como el control del material que entra y sale de la oficina, y otros recursos. Lo que estamos haciendo es definir los flujos de trabajo actuales, buscar el desperdicio, aquello que no da valor agregado (como dicen aquí), para intentar quitarlo o en su defecto minimizarlo e intentar definir el flujo óptimo. Estamos definiendo formatos estándares y creando plantillas, para agilizar todos los procesos.
Cada vez que empezamos a preparar un proyecto de mejora, yo “saco” mi caja de herramientas Lean y veo donde las puedo aplicar. Ahora mismo estoy llevando 5 proyectos, y me quedaría comenzar otro par de ellos. Tampoco quiero dilatarme mucho más en el tiempo, porque éste se acaba… ya he transmitido la importancia de realizar la mayor parte del trabajo entre septiembre y octubre, puesto que lo que no hagamos entre estos dos meses, difícilmente lo vamos a hacer en noviembre. Mi objetivo para éste es asentar las formas de trabajo y unas medidas de control, para que en mi ausencia todo sea sostenible.
Hay varios retos, como organizar un kanban con un semafórico… eso si, antes de utilizar la palabra, primero les explico lo que quiero hacer y el beneficio potencial. Porque sino, os imagináis la cara que pondrían si les digo que también vamos a hacer un kaizen?
Por cierto, también estoy organizando una especie de agenda fija o “encriptada “… quizás sea la primera agenda fija en el mundo de la cooperación! A ver qué tal sale….
Óscar con Roberto, responsable de la jardineria y el mantenimiento de la oficina. |
Entre proyecto y proyecto, intento conocer a gente, relacionarme con ellos y enriquecerme con sus vivencias y conocimientos.
Óscar, me encanta tu blog, sigue escribiendo, es una experiencia genial!!! Luego te ficharé para hacerme los artículos del Entre Líneas, ja,ja,ja...
ResponderEliminarPor cierto, he publicado tu blog en la web para que todo el que quiera pueda seguirte.
Un beso y disfruta de la experiencia,
Inés
Hola Oscar un saludo, todo lo que cuentas está muy bien pero seguro que lo primero que has hecho ha sido buscar parque y gente para correr..jejejeje..
ResponderEliminarQue te vaya bien.
Un saludo.
Alberto.
Me alegro que os guste... Tienes razón, como me conoces, alguna carrera que otra ya me he echado por las calles de Managua...
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